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miércoles, 7 de noviembre de 2018

LA JUSTICIA ESPAÑOLA RETRATADA


LA JUSTICIA ESPAÑOLA RETRATADA
ANGHEL MORALES
El tópico de la Banca Siempre Gana, parece ser el mas corriente en los medios informativos españoles y podía quedar así de feo, sino fuera que aparte de esta ganancia no estuviera una sucesión de hechos que ponen en evidencia a los jueces y a los Tribunales Españoles, como los del Tribunal Supremo elegidos a dedo por la clase política. Un Tribunal que se contradice y echa por tierra tres sentencias en las que daba la razón a los clientes y tenían que pagar los bancos. El señor Lesmes cuando mandó parar estas sentencias dijo que no se iban a echar abajó, la verdad que mintió como un cosaco. Un resultado de 15 á 13 cambia las sentencias anteriores y decide que tiene que seguir pagando el cliente: a joderse toca.
Los bancos que fueron rescatados y que costaron 70.000 millones de euros, que en principio iban a devolver, pero que a los dos años ya el señor Montoro dijo que los bancos no iban a devolver una mierda. Podemos lleva tiempo pidiendo un impuesto a la banca, por lo menos como medida de compensación por este rescate, pero ya sabemos que el poder económico controla con facilidad al poder político. Los bancos han perdonado deudas al PP y al PSOE, siempre los han tenido como aliados y las leyes les han favorecido, venden sus pisos a fondos buitres, echan a los ciudadanos menos pudientes, retiran los cajeros de zonas aisladas donde no hay sucursales y en definitiva hacen lo que le sale de los cojones y a callarse toca. Sabíamos que los políticos estaban al servicio de la banca, pero hemos visto con esta sentencia que los jueces también. Puta sociedad capitalista, donde políticos y jueces hacen lo que les da la gana y nadie puede ir contra ellos. Vemos las grabaciones de Villarejo, como una ministra llama maricón a un compañero, que conocía que jueces y fiscales se iban de putas con niñas menores y no lo denuncio. Vemos como la Cospedal fabricaba tramas contra sus rivales políticos de la forma mas sucia y barrio bajera, pero todos están bien situados, algunos no dimiten, se han forrado a consta de todos nosotros y ahora vemos que bancos, políticos y jueces son todos enemigos del pueblo.

Nunca creí en la justicia española, recuerdo aquel juez en mi isla que remitía los acusados a determinados abogados a favor de los que siempre fallaba. También aquellos compañeros de la CCT, eso ya en lo que llaman democracia, detenidos sin motivo, represalias del colonialismo, cuatro meses detenidos, 29 días en huelga de hambre, siete ciudadanos a los que se les privó de su libertad, los soltaron sin cargos y encima el hospital le pasó la factura a cada uno. Hoy vemos a Otegui como el Tribunal de Estrasburgo le da la razón, se vulneraron sus derechos, en 2010 rechazaron a una juez porque era imparcial con respecto a Otegui, pero unos años después es el Tribunal Constitucional Español el que da el visto bueno a la dichosa juez, que por supuesto dicta condena contra el político vasco, hoy Europa le ha dado la razón, pero aquí no ha pasado nada, con lo de la Banca, apenas ha sido comentado en los medios. Además, Otegui no cae bien a la mayoría de ellos, pero aquí no es cuestión de gustos, sino de justicia y contra Otegui se ha cometido una gran injusticia. Uno se plantea que igual puede pasar con los Presos Políticos Catalanes, sobre los que ya varios países europeos han dicho que no admiten las causas que se enarbolan contra ellos. Igual los condenan y tienen que ir a Europa, igual los Tribunales internacionales no ven delitos en sus actuaciones ¿quién les devuelve lo que le han quitado? Uno escucha a los juristas y no se ponen de acuerdo, amnistía internacional ya se ha manifestado en contra de su detención. La justicia tiene que ser creíble, no puede estar al servicio de ninguna causa, ni se puede aplicar por ideologías o por simpatías, la libertad es un valor muy importante, no se puede privar de ella sin motivos ni razones suficientes. Creo que son muchos los errores, las contradicciones de la justicia española y hoy por causa doble, ha quedado retratada.

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