INDEPENDENCIA

INDEPENDENCIA

JM AIZPURUA

¿Es el Estado español independiente? Debe mandar su Presupuesto Anual a Bruselas para que se lo aprueben unos burócratas, agentes encubiertos de los Lobbys. Vascos y catalanes no aceptarían esto mismo para ellos desde Madrid.

Entonces ¿Qué es la Independencia en 2018 dentro del Estado español?

Indudablemente, nuestra inercia histórica nos arroja a la conquista de un Estado propio; eso es Independencia.

Pero la complejidad de la Globalización y el Imperio de los Lobbys, plantean un escenario diferente al que nuestros ancestros patrióticos descubrieron en él su sentido de pertenencia a una nación y sus ansias de independencia. Hoy debemos repensar conceptos.

Las naciones sin Estado propio, incluidas en otro ente político administrativo, como son la colonia Canarias, Euzkadi-Navarra, Galicia y la Catalunya mediterránea, están neutralizadas por Leyes que ellos no crearon que les impiden cualquier avance democrático territorial, por lo que abocadas a la rebelión es en la fuerza del Estado donde encuentran su límite. Esa son las reglas de juego, donde coinciden con las instituciones europeas manejadas por los Lobbys interesados en la unidad de mercado.

Los caminos individuales, como el actual catalán, son vías sin salida. No es cuestión de porcentaje independentista, pues si ahora tienen un 49%, que no es suficiente, cuando alcancen el 55%, les dirán que ellos no tienen derecho a decidir. Sólo el Estado lo tiene.

Y ese es el quid de la cuestión independentista. Solo con la superación del Estado neofranquista, puede accederse a escenarios en los que la individualidad nacional puede comenzar a potenciarse.

El actual momento histórico, requiere que las naciones ibéricas y la colonia canaria actúen coordinadas entre ellas y en sintonía con los nuevos españolistas democráticos que quieren un Nuevo Estado, libre de las lacras históricas del imperialismo castellano, y de las injusticias sociales de una casta oligárquica y endogámica que impide el progreso de una ciudadanía hoy precarizada y significativamente concentrada en territorios donde la casta dispone de mayores poderes de represión y dominio económico.

Los caciques, españolistas e independentistas, protegen su terruño y no entienden las nuevas reglas de juego de la Globalización, que pudieran dejarles sin sus parcelas de poder y su corta visión les tiene mirando su árbol sin acertar a ver el bosque. Objetivamente, su radicalismo independentista es una gran aportación al inmovilismo imperial españolista, que solo debe aplicar el Manual con el que llevan siglos sojuzgando personas y naciones: represión y corrupción.

Crear plataformas electorales, pues ya células conspirativas no resuelven, es el camino inmediato en el que los independentistas y españolistas pensantes ahora que han comenzado a ello, es la tarea que aportará un futuro esperanzador para los marginados del Régimen 78; sociales, nacionales, migrantes y feministas.

40 años franquistas, otros 40 de democracia neofranquista, han llevado al Estado a una situación insostenible, quebrado económicamente, insignificante en el tablero internacional y apéndice de los “grandes”, y socialmente invertebrado. Si no hay un cambio de rumbo, en otros 40 habrá pasado a destruirse en luchas cainitas contra un Estado Saturno.

¡Sálvese el que pueda!