EL RINCÓN DE LOS CRETINOS

EL RINCÓN DE LOS CRETINOS

POR CARLO FRABETTI

Gracias, cretinos, pusilánimes, indignos, embusteros, calumniadores, demagogos, prepotentes, prevaricadores, mercenarios, desertores, lacayos, irresponsables, corruptos, incontinentes, hipócritas, mezquinos, resentidos, paniaguados… Gracias por haber contribuido a que hoy el pueblo catalán esté más unido que nunca y a un solo paso de la independencia y la república.

En el Museo de la Revolución, en La Habana, hay un mural en el que, bajo el rótulo RINCÓN DE LOS CRETINOS, aparecen las caricaturas a tamaño natural de Batista, Reagan, Bush y algún otro destacado enemigo de la Cuba revolucionaria (valga la redundancia, puesto que no hay otra). En los carteles que los acompañan, se les da irónicamente las gracias porque, con su brutalidad y su torpeza, les mostraron con especial claridad a los cubanos y a los demás pueblos del mundo el verdadero rostro del capitalismo, contribuyendo con ello a consolidar el proceso revolucionario.

En este otro rincón de los cretinos que es la esquina suroccidental de Europa, también hemos de agradecerles a unos cuantos de ellos que hayan puesto su cretinez al servicio de la toma de conciencia y la transformación social.

Démosles, pues, las gracias al Gobierno de Rajoy y a sus títeres jurídicos por manipular la ley para intentar -en vano- silenciar al pueblo soberano de Catalunya: Gracias, cretinos, por mostrar, una vez más y de manera especialmente clara, vuestra verdadera talla moral y política, vuestro total desprecio hacia ese mismo Estado de derecho que decís defender. Gracias por recordarnos que sois los herederos de Fraga y Aznar, de Franco y Millán Astray, de los Reyes Católicos y la Inquisición.

Gracias, Rivera y Arrimadas, por advertirnos de que no solo los viejos casposos y las damas del Opus mantienen vivo el legado del franquismo.

Gracias, Sánchez e Iceta, por confirmar que sois los alevines de González, Guerra, Barrionuevo, Corcuera…, es decir, de la traición y el terrorismo de Estado.

Gracias, ABC, El Mundo, El País, La Razón, TVE…, por una publicidad gratuita (en ambos sentidos del término) que ha dado a conocer las reivindicaciones del pueblo catalán en una medida mucho mayor de la que habríamos podido imaginar en nuestras previsiones más optimistas. Gracias por unas mentiras, tergiversaciones e injurias que, viniendo de quienes vienen, nos reafirman y nos fortalecen.

Gracias, firmantes de los manifiestos de los “intelectuales de izquierdas”, por habernos suministrado una lista extensa y actualizada de impostores, oportunistas y vientres agradecidos.

Gracias, Joan Manuel Serrat, por proclamar que eres tan demócrata, tan progresista y tan honrado como tu amigo Felipe González.

Gracias, cretinos, pusilánimes, indignos, embusteros, calumniadores, demagogos, prepotentes, prevaricadores, mercenarios, desertores, lacayos, irresponsables, corruptos, incontinentes, hipócritas, mezquinos, resentidos, paniaguados… Gracias por haber contribuido a que hoy el pueblo catalán esté más unido que nunca y a un solo paso de la independencia y la república.

Nota: Este artículo es un refrito del que, con el título Gracias, cretinos, publiqué en 2009 a raíz de los ataques institucionales a la candidatura de Iniciativa Internacionalista. Solo he tenido que cambiar los nombres propios (y no todos) y poco más. La historia no se repite, pero la histeria sí: el poder repite sin cesar sus mentiras y atropellos, por lo que no hay más remedio que repetirse en las réplicas