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martes, 3 de enero de 2012

BEGIN THE BEGUINE


BEGIN THE BEGUINE
L. Soriano
Empieza el baile, y el más feo está feliz, todos están obligados a bailar con él, si me permiten el cambio en la frase popular. Los recortes, las subidas de impuestos y de todo tipo, el acogotamiento y el situar a algunos sectores en lugares más lógicos, están muy bien. Yo lo acepto y doy y pido comprensión.               Sin embargo, espero con ansiedad que continúe la música y empezar a que me agrade la letra que ya Soraya ha dejado claro que esto es solo el empezóse del comienzo del principio del inicio.
 Espero y hubiese deseado que se hubieran recortado primero ellos, los políticos, politicastros y otros allegados, y sus emolumentos fijos, variables, mediopensionistas e indeterminados, todos los componentes de la muchedumbre apesebrada, anexados y asimilados, a la mitad como mínimo  y no solo en sueldos y dietas, sino en otros privilegios de los que disfrutan.         Que hubiesen empezado por despedir agradeciendo los servicios prestados, con cena homenaje y reloj de pulsera a las Patronales y los Sindicatos del pozo de las subvenciones. Hubiese deseado y espero, que se decretara el cierre de todas las Televisiones autonómicas o que se privaticen las que puedan.        Que se concentraran los Ayuntamientos, se redujeran los ediles,  sus sueldos,que se les anulen las visas, coches, comidas y viajes a cuenta del erario público. Que se anularan las subvenciones no sociales, todas, sustituyéndolas por bajadas generalizadas de impuestos a las empresas, todas por igual, que ya el impuesto de sociedades y los módulos asesinos  se encargaran de nivelar los beneficios reales si los hubiere. Que se recuperara de todas o de muchas de las Autonomías ¡Ay Dolor!, algunas de las competencias básicas como sanidad, educación o recaudación. Que se desmontaran casi todas las indefensiones fiscales provocadas por las absurdas y seguramente ilegales normativas fiscales disparatadas que se han creado en los últimos tiempos por las 5 administraciones que padecemos. Sin recuperar el sentido de la justicia y del rigor fiscal, el contribuyente se situará como enemigo de la Administración ya que a donde no llega la razón llega la evasión o lo siguiente.
Hay más cosas, pero, empezar por nosotros, por la vapuleada clase media que va hacia su extinción irreparable, por los funcionarios y por lo fácilmente recaudatorio es un grave error. Solo empeorara las cosas si no se trata de lo expuesto y otras actuaciones más importantes aunque a primera vista les parezcan estas tomadas más urgentes. Yo, creo que empezando por ellos nos habrían dado moral, y por tanto me he llevado una decepción, aunque aun espero que sea el Principio del Principio y sigan todas y muchas más, que nos hagan recuperar la confianza, la sensación de unidad en el dolor, y la no discriminación de sufridores de esta madre de todas las crisis.                          Espero ansioso por la continuación del begin.
 A reflexionar.

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