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jueves, 26 de enero de 2012

Al comité de descolonización de Naciones Unidas


España, un Estado forajido
H.E. Francisco Carrion-Mena, Chairman, Special Committee on Decolonization, United Nations

Canarias, 25 de Enero de 2012. Movimiento por la Unidad del Pueblo Canario (Movimiento UPC). El representante del ejército de ocupación español en Canarias, César Muro Benayas, con el cargo de jefe del mando militar de España en Canarias, ha reconocido ante los medios de comunicación la relación existente entre la instalación de antenas militares en la isla canaria de Fuerteventura, concretamente en la montaña de La Muda, y los supuestos yacimientos petrolíferos en esta zona del Océano Atlántico. Reconoció también que “Las tensiones entre España y Marruecos se agudizarán” por los supuestos yacimientos. El citado militar al servicio del ejército español de ocupación en Canarias reconoció igualmente ante la prensa que “los millones de turistas europeos que visitan el Archipiélago se sienten bien protegidos con el Ejército en las Islas y con su dependencia de la OTAN", coaccionando tanto a los afectados por las instalaciones militares como a los representantes institucionales del pueblo de Fuerteventura, instándoles "a que vayan al Ministerio de Defensa a Madrid". Por si quedaba alguna duda el representante del ejército de ocupación etc., añadió: "Esto no es León o Segovia".Reconoció igualmente la presencia en el ejército de ocupación que representa de soldados canarios que ejercen en Afganistán, mediante la sentencia “los soldados canarios en Afganistán han estado entre los mejores". Las intenciones del Ministerio de Defensa de España de ampliar sus instalaciones en la cima de la Montaña de La Muda han sido rechazadas por el Parlamento de Canarias, el Consejo de Gobierno, el Cabildo de Fuerteventura, ayuntamientos insulares y colectivos sociales.

España viene ocupando el Archipiélago Canario de forma ilegal, mediante una violenta, cruel y sanguinaria invasión genocida desde el año 1495, aunque la citada invasión armada comenzó desde el año 1402, invasión a la que resistió heroicamente el pueblo canario durante más de noventa años. Muchos de nuestros antepasados fueron asesinados y otros muchos fueron hechos prisioneros y vendidos en los mercados españoles y europeos de esclavos. Todo esto está ampliamente documentado en la historia.

Los soldados de los antiguos ejércitos canarios fueron obligados a enrolarse en el ejército español de ocupación, como ocurre actualmente, una de las pocas posibilidades que da España a nuestra cautiva juventud (recuerde que en las declaraciones comentadas anteriormente se reconoce que los canarios son parte importante del ejército español en Afganistán).

El genocidio de los hermanos pueblos de America se inició en el aciago año de 1492, por los mismos mercenarios que esclavizaron al pueblo canario, como puede corroborarse mediante la confrontación de esta fecha con las anteriores referidas a la invasión de Canarias.

Desde ese momento Canarias atraviesa una crisis crónica que obliga a nuestra juventud a emigrar del archipiélago para conseguir sobrevivir, concretamente desde el año 2008 hasta la actualidad se cuantifican oficialmente en 109.087 el número de canarios y canarias que han dejado el archipiélago en busca de trabajo. Sin embargo todos los españoles al servicio del colonialismo, unos 380.000 según algunas estimaciones, siguen empleados, ocupando los puestos de la administración colonial.

Pero esta emigración no es la excepción, sino la norma. La “real” cédula del 25 de Mayo de 1678, siendo rey Carlos II, establece que, para poder comerciar con las mal denominadas Indias Occidentales había que enviar cinco familias por cada cien toneladas de productos que se exportaran desde Canarias ¿Quiénes pagan ese tributo?  Los emigrantes canarios, destinados, entre otras tierras, a poblar las llamadas Lousianas, que España y Francia se disputaban por entonces. Concretamente en 1777, se ordena que vaya una colonia de canarios que puedan ser útiles en la labranza y la manufactura. En esta expedición salen de Canarias 125 reclutas con sus familias. En 1778, salen de Canarias 292 personas y 18 niños de pecho. En otro barco salen en el mismo año 423 personas y 37 niños de pecho. En 1779 se trasportaron 406 personas y otro barco mas con 423 personas. Y miles y miles aún sin cuantificar. Es lo que históricamente se conoce como tributo de sangre. Hay actualmente más canarios en el continente americano que en Canarias.

El citado representante del colonialismo afirma que los millones de turistas que vienen a Canarias se sienten protegidos con el ejército de ocupación español en las islas y con su pertenencia a la OTAN. Se da la circunstancia de que el 12 de marzo de 1986 se convocó un Referéndum sobre la pertenencia o no a esa organización armada conocida como OTAN y en el que el pueblo canario se  manifestó mayoritariamente en contra, rechazando integrarse en la misma. En base a esa clamorosa victoria exigimos el desmantelamiento de las bases militares de nuestro territorio y el respeto a nuestra democrática decisión.

El representante del ejército colonial reconoció en su comparecencia ante la prensa que la intención de España de apoderarse del petróleo del subsuelo de Canarias agudizará las tensiones con nuestro país vecino, Marruecos. El caso es que España hasta ha nombrado un canario a su servicio como ministro de industria, cuyas primeras declaraciones cuando tomó posesión en la capital de la metrópoli fueron que no se olvidaría de Canarias y lamentablemente así ha sido: ya está gestionando la instalación de dos plantas regasificadoras en las dos islas más pobladas, Tenerife y Gran Canaria, se ha incrementado la presión militar y se prepara el saqueo de nuestras supuestas revervas de combustibles fósiles, habiendo creado en poca más de un mes una atmósfera irrespirable en nuestro territorio.

La Parte IV de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (Convención de Montego Bay de 1982) está dedicada a la definición y regulación de los espacios marítimos y aéreos en los llamados Estados archipelágicos (en alusión a la zona marítima denominada pelágica, una de las tres denominadas zonas litoral, pelágica y abisal) (Art. 46 al 54). A tal efecto se entiende por Estado Archipelágico "al constituido totalmente por uno o varios archipiélagos y que podrá incluir otras islas" (Art. 46, a). Y por archipiélago "un grupo de islas, incluidas partes de islas, las aguas que las conectan y otros elementos naturales, que estén tan estrechamente relacionados entre sí que tales islas, aguas y elementos naturales formen una entidad geográfica, económica y política intrínseca o que históricamente hayan sido considerados como tal" (Art. 46, b).

En justicia la Tercera Conferencia (que desembocó en el Convenio de 1982) rechazó la aspiración de los Estados mixtos (como es el caso de España) de dar a los archipiélagos dependientes de Estados el mismo trato que a los Estados archipelágicos, para evitar esquilmar aún más a las colonias, como es el caso de Canarias, por lo que España está intentando recurrir al método que mejor conoce, la picaresca, para seguir esquilmando a nuestro pueblo, ahora no mediante la venta de esclavos en los mercados internacionales ni el tributo de sangre, sino mediante los recursos naturales que la Convención sobre el derecho del mar trata de proteger.

España está gobernada por grupos e individuos que no respetan los derechos humanos, convierten el derecho en una farsa, o mejor en un sainete y sustituyen las normas éticas de la convivencia social por un comportamiento propio de bandidos, no de personas civilizadas y mucho menos de estadistas. Sus gobernantes incumplen las leyes y convenios internacionales y desafían, en vez de acatar, las decisiones de los organismos internacionales que están encargados de velar por el mantenimiento del orden y la paz mundial, dando lugar a un auténtico estado forajido, en definición del filósofo John Rawls.

Canarias aún no es un Estado archipelágico, por lo que la legislación internacional reconoce 12 millas de aguas jurisdiccionales alrededor de cada isla, espacio que administra la potencia de ocupación colonial, España, en consecuencia las aguas que rodean a nuestro archipiélago o son de jurisdicción española o marroquí o internacionales.

En base a lo expuesto es fácil de entender que es urgente proceder a la descolonización de este Archipiélago y a la delimitación de nuestras fronteras, respetando el ordenamiento jurídico internacional, específicamente la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar y la Resolución  1514 (XV) de 14 Dicimbre de 1960, de las Naciones Unidas (Declaration on the Granting of Independence to Colonial Countries and Peoples). Ambas han sido suscritas por España, aunque lamentable y vergonzosamente es un estado que no respeta la legislación internacional, por lo que de seguir con su empecinamiento le sugerimos que, tras los trámites oportunos, se proceda a sancionar a dicho país y de persistir en su misma actitud proceder a su expulsión de las Naciones Unidas.

Rogamos dé traslado de este escrito tanto al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas como al Tribunal Internacional de Derecho del Mar.

El Movimiento por la Unidad del Pueblo Canario denunciará ante la prensa y las organizaciones internacionales esta burda maniobra del colonialismo español, en defensa de los intereses de los canarios y canarias.


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