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sábado, 3 de julio de 2010

QUE ASCO Y QUE VOMITIVO ES VER JUGAR A ESPAÑA

España es un país de mediocres, de llorones, que y tienen todas las justificaciones habidas y por haber cuando pierde, pero son un verdadero asco y vomitivo cuando ganan. Lo de Fernando Alonso por ejemplo es el caso más llamativo de la decadencia y de la mediocridad española. Le dieron un príncipe de Asturias cuando aún no había ganado nada, pero nada. Ha estado de escudería en escudería y lo único que ha logrado es un manual magistral de como no hacer amigos. Se ha peleado con dios y la virgen. Minardi tuvo que desaparecer después de su paso, ha estado metido en todos los fregados, los españoles le están el mejor coche, pero ni aún así gana y lo único que hace es llorar. El año pasado hizo el mayor de los ridículos también a costa del dinero español, la misma escudería con menos de la mitad del presupuesto, con dos pilotos modestos, pero que cada uno tiene el doble de puntos a esta altura de la temporada que Alonso en toda la pasada.

Fútbol, mediocridad absoluta, es el juego más aburrido y más soporífero del mundial, da verdadero asco y ganas de vomitar, pero eso parece que le gusta a los españoles, la mediocridad, van pasando con ayudas arbitrales, una expulsión injusta a los chilenos, un gol en fuera de juego con los portugueses. Pero ellos, su mediocridad y su complejo siempre les hace mirar a los árbitros y echarles la culpa a los árbitros, aunque estos sean sus aliados. Escuchar a los locutores de la Cinco produce arcadas, no son profesionales, se empeñan en engañar, mienten descaradamente ante una afición que lo que quiere es ganar como sea. Escuchar a Camacho -antiguo seleccionador español- es para morirse de vergüenza: "NO IMPORTA QUE LOS ÁRBITROS SE EQUIVOQUEN SIEMPRE QUE SEA A NUESTRO FAVOR". Todo un ejemplo para los niños que lo estén escuchando y no hay nadie que proteste. ¿Este no es el que se pasa la vida insultando y arremetiendo contra los árbitros? Los árbitros tienen que ser justos señor Camacho, incluso cuando juega España. ¿Por qué se pasa usted inventandose faltas y errores arbitrales que no existen, solo para confundir a los que ven la tele? ¡Vayase a la mierda! Personas como usted sobran en el fútbol.

Hoy el árbitro fue malo. Empezó permitiendo el juego duro de España -a los 5 minutos Sergio Ramos ya había roto una nariz-, `pero no pasa nada es España. ¿Si hubiera sido al revés que hubiéramos dicho? Anula un gol legal a Paraguay, pero esto no merece un comentario, esto no cuenta. ¿Qué pasa si se lo hubieran anulado a España? Piqué hace un Penalty claro, agarrón dentro del área, último hombre, por lo tanto roja y a la calle, pero no vio ni la amarilla, tampoco merece un comentario. Penalty dudoso a favor de España, Villa entra en el área paraguaya pujan do con un defensa, pero no llegaba al balón ni de coña y a tirarse toca y penaly, "compensación"-diría yo. Aquí si `piden los locutores: "roja y expulsión", que forma tan diferente de ver las cosas. Un arbitro que machacó a Paraguay todo el partido. Pero España ganó y eso es lo importante. Miren, aunque España gane el mundial -que espero que no- tiene una selección de mierda, que aburre hasta los ovejas y que va pasando a trancas y barrancas, con ayudas arbitrales, pero eso no importa... Perdón voy a vomitar y vuelvo.

El fanatismo no es bueno. Hay deportistas españoles como Nadal, Contador y otros muchos que ganan y `pierden, pero siempre con dignidad, con deportividad y con clase, más no es el caso de la selección de fútbol. Además, me toca las pelotas el que algunos aprovechen su asquerosa selección para fomentar el españolismo en canarias, para inundar nuestras callas con sus invasoras banderas. El enemigo no descansa, aprovecha cada minuto para aumentar su presencia colonial y en este caso aprovechan el fútbol para ello. también me da asco ver a independentistas canarios -supuestos- celebrar las victorias de la selección española. Que asquito me dan todos. ¿La dignidad se perdió? Como diría Segundino Delgado. Ya me tocará reír cuando pierdan escuchando como lloran y lo justifican.

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